Ese es mi título para la crónica de hoy, el partido visto globalmente ha estado bien, especialmente la segunda mitad, que ha sido cuando los dos equipos han podido jugar a esto. En la primera, el ímpetu del caos fue frenado por una serie de calaveras inoportunas que les hicieron perder el balón y quedarse sin opciones de recuperarla, por lo que anotar se antojó imposible. Fuen un quiero pero no puedo. En el segundo tiempo los hombretones de PacoSillas hicieron muy bien su trabajo y anotaron mediada la segunda mitad gracias a unos buenos movimientos y a un pase digno de Tom Brady. El caos se encontraba en la tesitura de anotar en 4 turnos lo que no pudieron hacer en 8, y lo consiguieron cuando el árbitro ya miraba el reloj, el TD del empate fue seguido del pitido final. Todo se decidiría en la prórroga, donde los grandes jugadores aparecen y los partidos se transforman en obras de arte... Y una mierda. La prórroga fue, para ambos equipos, una broma pesada. Nuffle se lo pasó en grande. Jugadores por el suelo, resbalones, un balón untado en aceite y un minotauro poseído por el espíritu de Leonardo Dantés (memorables sus 9 calaveras en 12 dados). Cuando Nuffle dejó de reírse ya había acabado el partido, por lo que el árbitro procedió a lanzar la moneda y poner fin a tamaño esperpento. La moneda cayó del lado del caos, al parecer las hazañas del minotauro le granjearon el apoyo de sus dioses. Partido que pudo haber ganado cualquiera, donde la táctica quedó un poco de lado salvo en las jugadas de los TD, bastante divertido y frustrante, en proporciones iguales. Darle las gracias a PacoSillas por aguantarme y desearle suerte en la temporada, si juega como hoy dará guerra.”
Ese es mi título para la crónica de hoy, el partido visto globalmente ha estado bien, especialmente la segunda mitad, que ha sido cuando los dos equipos han podido jugar a esto. En la primera, el ímpetu del caos fue frenado por una serie de calaveras inoportunas que les hicieron perder el balón y quedarse sin opciones de recuperarla, por lo que anotar se antojó imposible. Fuen un quiero pero no puedo. En el segundo tiempo los hombretones de PacoSillas hicieron muy bien su trabajo y anotaron mediada la segunda mitad gracias a unos buenos movimientos y a un pase digno de Tom Brady. El caos se encontraba en la tesitura de anotar en 4 turnos lo que no pudieron hacer en 8, y lo consiguieron cuando el árbitro ya miraba el reloj, el TD del empate fue seguido del pitido final. Todo se decidiría en la prórroga, donde los grandes jugadores aparecen y los partidos se transforman en obras de arte... Y una mierda. La prórroga fue, para ambos equipos, una broma pesada. Nuffle se lo pasó en grande. Jugadores por el suelo, resbalones, un balón untado en aceite y un minotauro poseído por el espíritu de Leonardo Dantés (memorables sus 9 calaveras en 12 dados). Cuando Nuffle dejó de reírse ya había acabado el partido, por lo que el árbitro procedió a lanzar la moneda y poner fin a tamaño esperpento. La moneda cayó del lado del caos, al parecer las hazañas del minotauro le granjearon el apoyo de sus dioses. Partido que pudo haber ganado cualquiera, donde la táctica quedó un poco de lado salvo en las jugadas de los TD, bastante divertido y frustrante, en proporciones iguales. Darle las gracias a PacoSillas por aguantarme y desearle suerte en la temporada, si juega como hoy dará guerra.”