Jane fue sorprendentemente la primera elfa en unirse al grupo que Greta y el viajero estaban formando. Jane nunca había escuchado hablar de Blood Bowl, su pasión eran los monetes. Vivía aislada en una comunidad de primates, estudiando su comportamiento y demás indiosincrasia. Cierto es que ningún elfo silvano sabía lo que Jane hacía. Una cosa es amar la naturaleza, y otra irse a vivir con monos dijo más de uno.

Nadie sabe que dijeron para convencer a Jane (o incluso si hizo falta convencerla siquiera), pero desde ese momento comenzó a entrenar con una determinación férrea. El único problema es que con la excusa de estudiar monos, nunca dedicó el tiempo suficiente a otras disciplinas más físicas, como el tiro con arco, movimiento por el bosque, y combate. Así pues tomó la posición de línea con la esperanza de la liga le pudiese enseñar todas esas habilidades sobre las que había leído mucho pero fracasado en poner en práctica.