Gorritas es peligroso tanto por sus arrebatos como por sus comentarios. Pocos han sido tan locos como para quitarle la gorra y ninguno ha vivido para contarlo.

Uno de los más rápidos del barrio, pero a veces parece de plastilina. Antes fué temido en la ciudad pero ultimamente se ha amariconado.

Es bastante rudo en su juego, que a veces parece poco efectivo. Aunque siempre se agradece tener a alguien que reparta estopa.

Es el negro del equipo. Cuando juega no suele hacerlo del todo mal aunque es más famoso por sus celebraciones en la Bodeguita que por su juego.

Cuando se cabrea puede ser un jugador duro, pero esto suele ser muy pocas veces. Algunos dudan de que tenga sangre en las venas. Tiene la costumbre de no presentarse a los partidos por culpa de mujeres de dudosa reputación.

Se supone que es el director de juego, pero acostumbra a realizar jugadas extrañas y sin sentido que rara vez llegan a buen puerto. Es capáz de jugar con un dedo roto.

Esto es lo que queda de lo que un día fué el temido Lezana. Eran otros tiempos...

Tórrido es el metrosexual del equipo. Se depila las piernas y no se le ve un pelo en la cara. Suele poner el Biatlón como escusa pero nadie se lo cree.

Serruchazos es el jugador más extraño del equipo. A veces dice que va a jugar y va, otras dice que va y llegá pasada la segunda parte, otras dice que va y directamente no va, otras dice que no va y no va, pero nunca dice que no va y luego aparece.

Loko es uno de las últimas "perlas" que han llegado al equipo. Debido a las sustancias psycotrópicas que toma ha azquirido varias desventajas tales como Bone Head, Really Stupyd y Wild Animal. Se le distingue en el campo por la nube de humo que le rodea.

La función de Geni en el equipo es basicamente la de protestar. A veces protesta incluso encontra de su equipo. Un elemento de cuidado.

Rulo es el chupón del equipo. Si le llega la pelota no la soltará bajo ningún concepto, da igual que se encuentre rodeao de contrarios. Nunca juega los Domingos.

Amante del buen beber y del buen comer, Uri corre todo lo rápido que su tripa se lo permite. Lo que a veces es realmente sorprendente.